Yo también lo sentí
Yo también lo sufrí.
Hay veces que quisiera ser otra.
Esas noches son largas como ninguna.
Ay, como duele acá dentro.
Desliza, suave, su mano. Y mi corazón se para un segundo.
Respiro, intranquila. Porque no quiero que te vayas nunca más de mi lado.
Quisiera pegar esa mano a la mía, con pegamento, quizás.
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